Ideas secundarias


Falencias del sistema actual de Educación

En tiempos actuales nos vemos expuestos a una educación basada en la cantidad de información que somos capaces de absorber sin tener la capacidad de seleccionar lo más significativo para la formación de una base amplia de “cultura general”. En estos términos la  educación se ha vuelto un medio para generar mano de obra en un mundo donde el crecimiento se ve como un acto cuantitativo y donde el aprendizaje es una herramienta temporal para el alcance de el éxito laboral, en vez de potenciar la curiosidad del intelecto como parte de nuestra propia humanidad y un medio continuo hacia el desarrollo individual y planetario.

         Bajo este desarrollo exponencial de la cultura individualista, la masificación del ingreso a la universidad ha potenciado la generación de nueva infraestructura y nuevas carreras destinadas a la especialización, y a perdido la oportunidad de utilizar el lugar privilegiado que tiene para el desarrollo de investigación, la promoción del pensamiento y la generación de nuevos maestros destinados a lograr un cambio socio-cultural en post del bienestar universal.

         En este sentido, nos hemos visto envueltos en una sociedad poco apreciativa del rol que posee la educación y el educador en la formación de seres humanos integrales, capaces de desarrollarse en diversas áreas del conocimiento y al mismo tiempo desarrollar ética y valores absolutamente necesarios para la vida en sociedad.

La formación de los futuros “maestros” debiera fomentar la apreciación de la Educación como un arte y una ciencia, donde es imperativa la enseñanza del “cómo enseñar”, además del conocimiento que se espera trasmitir; y es fundamental que sea el maestro quien implante la curiosidad por el intelecto y el pensamiento crítico; pero el sistema gubernamental actual ha dejado de lado la calidad docente para evaluar el “éxito”; la planificación ministerial se basa en la circulación constante de alumnos en el tiempo estimado de duración de la educación, lo cual genera alumnos con conocimiento “suficiente” para obtener el pase a la educación superior.



Rol Parental


El rol familiar en el gusto por el conocimiento es primordial, ya que bajo el ejemplo de padres con interés de adquirir nuevos conocimientos los niños pueden desarrollar interés similar por la investigación y el pensamiento crítico. En estos tiempos, el rol familiar dentro de la educación se ha postergado y debido al propio sistema que presenta a las instituciones educativas como servicios pagados, el rol parental en la educación se ha dividido en aquellos que exigen que todo el aprendizaje y los valores se inculque exclusivamente por los maestros, y aquellos que bajo el exigente sistema laboral, no tienen tiempo para reforzar el aprendizaje y conocimiento de sus hijos. Sin embargo, incluso sin lograr el tiempo de calidad para establecer ciertas normas y reforzar la enseñanza escolar en los niños, sigue siendo fundamental que los padres presenten el aprendizaje, la creatividad y la investigación como métodos entretenidos de apreciar el entorno, motivando siempre al alcance de resultados accesibles, y por sobre todo, al esfuerzo y la constancia.


Cuantificación de la calidad docente
 
El sistema actual de evaluación y planificación del sistema educativo toma como referentes tres grupos etáreos “significativos”, que abarcan desde los 6 años hasta los 24, la tasa de matricula en cada nivel educacional para la edad idónea del alumno, y se considera como “Éxito Total” la proporción de alumnos que egresa en el tiempo estimado, en relación a la matricula inicial del primer grado. Este método de evaluación de la planificación existente obviamente perpetúa los errores en la calidad del conocimiento. Además de esto, el sistema de evaluación de los resultados de aprendizaje – Simce- no logra detectar las deficiencias de la enseñanza, ya que se evalúa el logro de los contenidos mínimos dentro la planificación gubernamental, con un plazo de tiempo que permite a muchas instituciones preparar a sus alumnos para mejores resultados pero basados en la memoria a corto plazo; sin ser esto realmente significativo del aprendizaje logrado a largo plazo.

Ahora, las recientes planificaciones respecto a la educación, pretenden darle más autonomía a los “sostenedores” de los establecimientos educacionales, tanto en la contratación docente, como en la flexibilidad de la planificación estipulada. Esto; si bien pudiese lograr una adaptación mas pertinente de los conocimientos a las diversas realidades y necesidades del alumnado; deja al docente en una posición mas bien vulnerable, ya que debiera ser este quien priorice los conocimientos que estime como mas relevantes en su área de especialización y quien, con mayor conocimiento de las diversas realidades de sus alumnos, puede adaptar su planificación de manera que potencie las habilidades de cada uno de ellos.


  


Aplicación del marco teórico de Delors

Luego de desarrollar el tema de “aprender a conocer” de Delors, se espera de la nueva educación el incentivo de la curiosidad por aprender, bajo medios distintos a los actuales “premios y castigo”.

         El primer paso es identificar las razones de la desmotivación del alumno, presentarle nuevas alternativas de utilizar las habilidades que no utiliza a menudo y lograr que se plantee metas concretas y alcanzables. Una vez logrado esto, el educador puede presentarle las herramientas necesarias para ayudarlo a desarrollar sus talentos, para que el alumno comprenda que es capaz de hacerlo y confíe en sus habilidades.

El educador debe incentivar para esto al alumno a que genere una cultura general amplia para que así descubra las áreas en las cuales puede potenciar sus habilidades.

 El educador de calidad debe saber orientar a los grupos, apoyarlos, tener un amplio conocimiento y el pensamiento necesario para destacar lo relevante en cada materia, debe ser capaz de anticipar y resolver conflictos y dificultades para no generar frustración en el alumnado. De esta forma, teniendo reconocidos los estilos de aprendizaje del alumnado podremos orientarlo de la manera adecuada y así este aprenda de manera eficiente y concreta, quien a la vez será capaz de controlar su aprendizaje, reconocer sus puntos débiles y bajo qué condiciones aprende mejor y superar las dificultades que se le puedan presentar.

Una vez que llegue la hora de evaluar el aprendizaje, debemos recompensar el esfuerzo realizado, para aumentar la motivación del alumno, más que con una calificación, reconociendo públicamente el trabajo bien hecho.

Una forma eficiente de determinar el aprendizaje del grupo curso es incentivar el debate, organizándolos en circulo; ya que la disposición tradicional de las aulas favorece el trabajo individual pero no el trabajo en equipo ni la interacción entre ellos; se les entrega una premisa y se les otorga un tiempo para que organicen sus opiniones, luego podrán exponer sus ideas y así utilizar los conocimientos para utilizarlos como fundamentos para defender su posición.